En JANDONIZ ofrecemos prácticamente todas las ventajas de una casa compartida y otras cuantas más muy interesantes
Cada vez se escucha más: Cohousing o viviendas compartidas por varios mayores, por lo general con pocos recursos para plantearse vivir solos o bien recurrir a una residencia. Aunque la elección de compartir un piso no sea siempre por motivos económicos. Es, de hecho, una opción interesante para personas que quieren huir de la soledad, uno de los problemas más graves a los que se enfrenta la sociedad. Algunos gobiernos ya están tomando medidas para tratar de atajar esta “enfermedad silenciosa”. El Reino Unido, por ejemplo, ha creado un Ministerio de la Soledad.
Sea como fuere, el Cohousing ofrece ventajas innegables para los mayores:
- Pasar tiempo con personas de edad e ideas similares.
- Compartir los gastos que genera una vivienda (alquiler, luz, agua, calefacción, comida…).
- Añadido a lo anterior, una mayor libertad económica para poder comprar lo que a uno le apetezca: diferentes caprichos, viajes… O para contratar ayuda para la limpieza de la casa, hacer la comida, etcétera.
- Permite llevar las riendas sobre cómo envejecer. Seguir valiéndose por uno mismo.
Existen organizaciones sociales que se encargan de buscar este tipo de viviendas a los mayores y que incluso se ofrecen para mediar en las gestiones y en los problemas de convivencia que puedan surgir.
Porque no es oro todo lo que reluce.
Convivir no es sencillo y es normal que haya roces y desencuentros. Por eso es muy recomendable que quienes practiquen el Cohousing fijen de antemano unas normas mínimas para el funcionamiento del hogar, de manera que cada uno sepa a qué atenerse al menos en lo que respecta a las zonas comunes de la casa. Otra cosa es lo que la persona haga en su espacio personal.
Y pese a la existencia de estas normas mínimas de convivencia, va a ser necesario que los compañeros de piso aporten importantes dosis de respecto, solidaridad, colaboración y empatía.
En la televisión hemos visto desde hace tiempo algunos ejemplos de Cohousing. ¿Recuerdas la serie ‘Las chicas de oro’? ¿Y la más reciente ‘La que se avecina’ con Charo, Izaskun y Maritere?
En JANDONIZ defendemos el envejecimiento activo e independiente. Y nos incluimos como alternativa para ponerlo en práctica, por supuesto que sí.
Nuestra residencia NO TIENE NADA QUE VER con un asilo de los antiguos.
Abrimos nuestras puertas en 2011 como un centro adaptado a los nuevos tiempos, cómodo, amigable y con numerosos servicios de entretenimiento y socialización para los mayores.
Aunque desde el inicio fijamos que lo que nos iba a distinguir no iban a ser nuestras modernas instalaciones (comedores amplios y luminosos, habitaciones individuales o dobles -todas exteriores-, zona común, sala para actividades de ocio, biblioteca, gimnasio, lavandería, peluquería…), sino el trato que iban a recibir nuestros mayores, el cariño que les íbamos a proporcionar, lo queridos y acompañados que se iban a sentir.
Ahí esta nuestro secreto.
Por eso decimos que JANDONIZ es como un Cohuosing, con todas las ventajas que ofrece esta opción y otras muchas más que compensan, pensamos, el coste económico. Por ejemplo:
- Atención médica permanente. Nuestros mayores tienen a su disposición a un completo equipo sanitario (médico, enfermeros/as, fisioterapeuta, psicopedagogo…) para un óptimo control de su salud. El Departamento de Farmacia se encarga del seguimiento de los tratamientos, así como de la preparación de la medicación necesaria.
- Los mayores están siempre acompañados. Bien por el equipo de profesionales del centro, bien por otros residentes. Aunque lo que perseguimos es que mantengan el máximo grado de autonomía posible.
- Organizamos con frecuencia actuaciones y animaciones como grupos de baile y canto, cine, teatro o talleres. Y también realizamos actividades de ocio en grupo: excursiones, conferencias, charlas y visita a ferias.
- Trabajamos también la estimulación cognitiva por medio de ejercicios de orientación, lenguaje, lectura y escritura, cálculo… Y participamos en diferentes proyectos de intercambio generacional. Porque hay que estar activos tanto a nivel físico como mental.
- Los familiares pueden realizar las visitas que deseen a sus mayores, como si estuvieran en su casa.
- Amplio equipo auxiliar que está las 24 horas del día a disposición de los residentes. Con servicio de limpieza diario de las habitaciones (o con mayor frecuencia si fuera necesario).
En definitiva, en JANDONIZ ofrecemos lo necesario para que los residentes tengan una estupenda calidad de vida y practiquen el envejecimiento activo. Les hacemos ver que cumplir años NO es sinónimo únicamente de deterioro físico, sino que esta etapa de la vida también puede llenarse de retos, experiencias nuevas e ilusión. Les transmitimos que son importantes por su experiencia y sabiduría. Esa es nuestra misión y estamos orgullosos de ella.
Si tienes alguna duda o quieres que hablemos de algo en concreto, ponte en contacto con nosotros. Te atenderemos encantados.
